El lavado de arena es una etapa crítica en la producción de agregados para construcción, y el correcto funcionamiento de los equipos es esencial para mantener la eficiencia operativa. El equipo lavadora de arena tipo rueda XSD procesa entre 20 y 120 toneladas por hora, pero su rendimiento puede verse comprometido por fallas técnicas frecuentes. Identificar las causas comunes y aplicar soluciones prácticas puede reducir significativamente el tiempo de inactividad, aumentar la limpieza de materiales y mejorar la rentabilidad de la planta.
El desgaste de rodamientos, poleas o cadenas es una fuente habitual de interrupciones. La falla en la transmisión no solo detiene la producción, sino que también puede provocar daños colaterales en otras partes mecánicas. Según un estudio de campo en varias plantas, estas fallas representaron el 30% del total de paros no programados.
“Desde que implementamos el mantenimiento preventivo orientado en el sistema de transmisión, la frecuencia de paros bajó de 3 a 1 vez por mes, ahorrando miles en costos de reparación.” – Gerente de Planta, Cliente de México
El sellado deficiente conduce a filtraciones de agua y polvo, afectando la integridad del equipo y el entorno de trabajo. La pérdida de agua en el proceso reduce la eficiencia de lavado y puede causar corrosión. Los sistemas con sellado avanzado y diseño hermético muestran una menor tasa de fallas por estas causas, alineándose con la filosofía “prevenir antes que reparar”.
El impulsor está en constante contacto con arena y agua, por lo que su abrasión es inevitable. No obstante, el uso de materiales resistentes y recubrimientos especiales disminuye el desgaste progresivo. Un impulsor desgastado no solo afecta la limpieza, sino que puede generar vibraciones y desequilibrios en la máquina.
La acumulación de partículas gruesas o contaminantes puede detener el flujo dentro del equipo, ocasionando sobrecargas. Implementar inspecciones regulares y limpieza sistemática evita estas obstrucciones, asegurando un funcionamiento estable y prolongado.
Los motores eléctricos y su control están expuestos a la humedad y polvo. La protección contra sobrecargas, cortocircuitos y el uso de componentes de calidad alta minimizan este tipo de fallas. Es vital también capacitar al personal en maniobras adecuadas para evitar errores humanos que provocan interrupciones.
La implementación de un programa riguroso de mantenimiento que incluya inspección diaria, lubricación adecuada y reemplazo oportuno de piezas incrementa la vida útil de la lavadora de arena. Equipos con diseños innovadores que incorporan transmisión en baño de aceite sellado y protecciones anticorrosivas demostraron una reducción del 40% en fallas mecánicas durante el primer año de operación.
Menores fallas se traducen en menos interrupciones, mayor producción efectiva y menor gasto en repuestos y mano de obra correctiva. La estabilidad operativa fortalece la imagen de la planta frente a clientes y permite optimizar la cadena de suministro.
Es imprescindible valorar la inversión en equipos con baja tasa de fallas y altos estándares de limpieza, porque la rentabilidad a largo plazo será significativamente mayor y el coste total de propiedad menor.
No dude en dejar sus consultas en los comentarios o contactar con nuestro equipo experto para recibir asesoría personalizada. Un plan de mantenimiento profesional es la mejor inversión para asegurar una producción sin interrupciones.